Publicado el 26-07-2024 en UCC
Encuentro: “A 40 años de la Declaración de Cartagena”
Este jueves se desarrolló un encuentro en torno a los desafíos en el acompañamiento para la inclusión de personas refugiadas y con necesidades de protección.
Se trata de una iniciativa organizada por el Servicio Jesuita Migrante junto a nuestra Facultad de Ciencia Política y Relaciones Internacionales, en el marco del 40° aniversario de la Declaración de Cartagena. El encuentro se realizó en el Edificio Centro "Juan Carlos Scannone S.J." de nuestra universidad.
En este contexto, dialogamos con Julio Villavicencio S.J., director del Servicio Jesuita Migrante:
¿Cuáles son los obstáculos más importantes para las y los migrantes en relación con los desastres socioambientales y el cambio climático?
Uno de los obstáculos más grandes que tienen las personas que son víctimas de un desplazamiento forzado, a causa de desastres socioambientales o del cambio climático, es la falta de reconocimiento. Aún falta mucho camino por recorrer en la construcción de una mirada reconocida, consensuada y legitimada por parte de todos los actores sobre este fenómeno. Esto trae, como consecuencia, un vacío que no permite que se puedan desarrollar mecanismos adecuados para la protección de esta población.
¿Cuáles son las acciones que lleva adelante el SJM y las universidades jesuitas en este sentido?
El aporte que podemos hacer es, en primer lugar, visibilizar la problemática. Esto es lo que estamos realizando desde la Red Jesuita con Migrantes (las oficinas del Servicio Jesuita a Migrantes y las oficinas del Servicio Jesuita a Refugiados). Con el apoyo de las universidades jesuitas intentamos visibilizar el tema de la mano del proceso de Cartagena +40. Al mismo tiempo, con la UCC, intentamos poner en diálogo a los diferentes actores que vienen investigando y desarrollando los distintos temas abarcados por esta problemática. Existe un desarrollo teórico previo sobre estos elementos por separado, y Cartagena +40 nos invita a conjugarlos. Nuestro horizonte es ponerlos a dialogar en torno a la movilidad humana.
¿Qué nos dice la Declaración de Cartagena para nuestro presente?
Creo que la Declaración de Cartagena nos vuelve a demostrar que es un instrumento jurídico de protección válido y muy pertinente para responder a las dinámicas de desplazamiento que vemos actualmente en la región. Es un instrumento que busca proteger a las personas desde el origen, tránsito, destino y retorno. A su vez, es un proceso que nos hace reflexionar sobre las nuevas maneras de desplazamiento y nuevas vulnerabilidades que se desarrollan en nuestro tiempo. Finalmente, Cartagena sigue siendo un gran desafío para los Estados de la región porque se ven convocados a salir de sus propios intereses para desarrollar una mirada humanitaria y enfocada en los derechos humanos para responder a las personas migrantes, solicitantes de asilo y refugiadas.